jueves, 28 de marzo de 2013

Poesía clásica china (traducida por Guojian Chen)


RESPONDIENDO  A LA CARTA DEL EMPERADOR QUE PREGUNTA "¿QUÉ  HAY EN LA MONTAÑA?"

¿Qué hay en la montaña?
Sobre los cerros abundan nubes blancas.
Están allí solo para mi placer.
Lo siento, Majestad, mas no puedo enviároslas.

Tao Hongjing (452-536)


Wang Hui



INSCRITO EN EL TEMPLO DE LA CUMBRE

Paso la noche en la cumbre, en el Templo.
Alzo la mano y palpo las estrellas.
Mas ¡bajemos la voz! No molestemos
a los moradores del cielo.


Li Bai (Li Po) (701-762)


Guojian Chen, Poemas chinos para disfrutar (Latorre Literaria, 2012)

jueves, 14 de marzo de 2013

Mesa redonda: Blogger y poesía




Mesa redonda: Blogger y poesía
 Lugar: "Rincón de la poesía"  en la Biblioteca Pública "Manuel Alvar". C/ Azcona, 42 (Madrid)
Día 19 de marzo. 19 horas.

lunes, 11 de marzo de 2013

Una tumba en el aire: Paul Celan



"[...] la "Fuga de la muerte" para mí también es lo siguiente: un epitafio y una tumba [...]
 También mi madre tiene solo esa tumba".

(Paul Celan: carta a Ingeborg Bachmann del 12 de noviembre de 1959 en Tiempo del corazón. Correspondencia: Ingeborg Bachmann-Paul Celan (traducción de G. Mársico). Fondo de Cultura Económica, 2012)

martes, 5 de marzo de 2013

Posmodernidad y capitalismo




George Grosz


  Quizá el rasgo más sospechoso de la ideología posmoderna es el que señalara hace ya tiempo Jameson en su valioso estudio sobre la posmodernidad como dinámica cultural del capitalismo tardío (hablo de la posmodernidad como ideología, no como diagnóstico de una época ni como un clima histórico, por más que no resulte fácil deslindar tales perspectivas). Me refiero al hecho de que, paradójicamente en la época en que el capitalismo ha logrado convertirse en un sistema-mundo (como no lo logró ningún sistema político o económico del pasado), se prohíbe al pensamiento ocuparse de la totalidad. De ahí que, por más saludable que sea la invitación a pensar desde la diferencia y lo fragmentario, quepa también cierta distancia ante tanta insistencia. El todo se nos hurta precisamente cuanto más se muestra. Como la carta robada del célebre relato de Poe, no se ve porque está a la vista de todos.